El trastorno específico del lenguaje es uno de los trastornos del desarrollo más frecuentes y afecta aproximadamente a entre el 7% y el 10% de los niños que van al jardín de infantes.
El trastorno específico del lenguaje (SLI Specific Language Impairment por sus siglas en inglés), es un trastorno de la comunicación que interfiere en el desarrollo de las habilidades del lenguaje en niños que no tienen pérdida de audición. El trastorno específico del lenguaje puede afectar el habla, la capacidad para escuchar, la lectura y la escritura de los niños. También se le conoce como trastorno del desarrollo del lenguaje, retraso del lenguaje o disfasia del desarrollo. Es uno de los trastornos del desarrollo más frecuentes y afecta aproximadamente a entre el 7% y el 10% de los niños de 3 a 6 años. Por lo general, los efectos de este trastorno continúan en la edad adulta.
¿Qué causa el trastorno específico del lenguaje?
Se desconoce la causa del trastorno específico del lenguaje, pero hay descubrimientos recientes que sugieren que tiene un fuerte vínculo genético. Es más probable que los niños con trastorno específico del lenguaje tengan padres y hermanos que también han tenido dificultades y retrasos en el habla, comparados con niños sin este trastorno. De hecho, del 50% al 70% de los niños con trastorno específico del lenguaje tienen al menos un familiar con este trastorno. Aprender más de un idioma a la vez no causa el trastorno específico del lenguaje. No obstante, el trastorno puede afectar tanto a niños multilingües como a niños que hablan un solo idioma.
¿Cuáles son los síntomas del trastorno específico del lenguaje?
A menudo, los niños con trastorno específico del lenguaje tardan más en empezar a hablar (alcanzan las etapas del desarrollo del lenguaje hablado más tarde que otros niños de la misma edad).
Los niños en edad preescolar con trastorno específico del lenguaje podrían:
• tardar más en agrupar palabras en oraciones, en comparación con otros niños;
• tener dificultad para aprender nuevas palabras y conversar;
• tener dificultad para seguir instrucciones, no porque sean tercos, sino porque no entienden bien las palabras que se les dicen;
• cometer con frecuencia errores gramaticales al hablar.
Aunque algunos niños que se tardan más en empezar a hablar, con el tiempo logran ponerse al día con sus compañeros, los niños con este trastorno tienen dificultades persistentes con el lenguaje. Los síntomas comunes en los niños mayores y en los adultos con trastorno específico del lenguaje incluyen lo siguiente:
• uso limitado de oraciones complejas,
• dificultad para encontrar las palabras correctas,
• dificultad para entender un lenguaje figurado,,
• problemas de lectura,
• narración y escritura desorganizadas,
• errores gramaticales y ortográficos frecuentes.